En el evento, la destacada investigadora declaró sentirse muy honrada por el nombramiento, indicando que junto al directorio pretenden acompañar el proceso de este centro cultural potenciando sus posibilidades de conexión con una audiencia cada vez mayor.
Sus clases de periodismo político en la Escuela de Periodismo de la Universidad de Chile fueron enriquecedoras. Lucían como una reunión de pauta donde las respuestas de las y los estudiantes se cruzaban con los análisis irónicos de la profesora, quien ya miraba con ojos críticos la transición política —a medias— del país. Su historia es la de la primera directora de una escuela de periodismo en América Latina, que vivenció con valentía el exilio. También es la historia de un origen doloroso en medio del Holocausto nazi.