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Universidad de Chile

“Escucha Chile, la voz de la solidaridad”:

El podcast sobre la resistencia radial que hoy hace historia en el Premio Gabo

Escucha Chile: El podcast que hace historia en el Premio Gabo

El proyecto, realizado por Raúl Rodríguez - académico de FCEI- cuenta la historia de Escucha Chile, espacio de Radio Moscú, que mediante transmisión de ondas cortas y de forma clandestina buscaba romper el cerco informativo que imponía la dictadura cívico militar durante el proceso en Chile.

Durante 17 años una señal radial cruzó medio mundo para romper el cerco informativo impuesto por la dictadura cívico-militar chilena. Desde los estudios de Radio Moscú Internacional, el programa Escucha Chile se convirtió en un puente sonoro entre el exilio y quienes resistían dentro del país, denunciando día a día las violaciones a los derechos humanos y llevando aliento a quienes, en la clandestinidad, se aferraban a la información como acto de resistencia.

Décadas después esa historia vuelve a cobrar vida gracias al documental sonoro Escucha Chile, la voz de la solidaridad, realizado por el periodista y académico de la Facultad de Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile, Raúl Rodríguez. El trabajo acaba de ser reconocido como uno de los 50 nominados al Premio Gabo 2025, uno de los galardones más prestigiosos del periodismo iberoamericano.

“Ya estar entre los nominados es un reconocimiento enorme”, dice Rodríguez, quien explica que en los próximos días se conocerá si el podcast avanza a la terna final de su categoría, cuyos representantes serán invitados al Festival Gabo, en Bogotá. Pero más allá del resultado, Rodríguez destaca lo que este logro significa no solo para su equipo y la Universidad de Chile, sino también para la incipiente industria del podcast documental en el país.

“En Chile estamos en una fase de crecimiento del podcast, pero sigue predominando el conversacional, que es más simple de producir. Lo narrativo y documental, que es lo que hicimos con Escucha Chile, requiere investigación profunda, tiempo, diseño sonoro y trabajo riguroso”, explica.

Una arqueología sonora

El proyecto, financiado por el Fondo de Creación Artística de la Universidad de Chile, nació con la intención de conmemorar los 50 años del golpe de Estado de 1973. Sin embargo, debido a retrasos, la producción se postergó. Lejos de ser un problema, ese retraso permitió trabajar con más calma y profundidad en el material a utilizar.

“Un colega me dijo algo que me hizo mucho sentido: ‘Son tan importantes los 50 años como los 51 o los 52’. Y tenía razón. En 2023 hubo una avalancha de contenidos conmemorativos, por lo que quizás este proyecto se habría perdido en medio de esa marea”, reflexiona Rodríguez.

Lo que siguió fue un intenso proceso de arqueología sonora. Recuperar archivos de un programa que se transmitía en onda corta desde la Unión Soviética no fue tarea sencilla. “No hay un archivo completo de Escucha Chile. Los materiales están dispersos, algunos en manos de personas que trabajaron en el programa, otros en instituciones como la Biblioteca del Congreso Nacional o el Museo de la Memoria, pero siempre de manera fragmentada”, relata el realizador.

A esos archivos se sumaron testimonios inéditos de protagonistas, algunos de los cuales, pese al paso de los años, aún prefieren mantener las identidades falsas —“chapas”— que utilizaron durante la dictadura. “Eso demuestra que, aunque cueste creerlo, el miedo sigue presente. Hay huellas que no se borran”, advierte el académico.

De acuerdo a Rodríguez, uno de los momentos más conmovedores de la investigación fue encontrar el testimonio de Pascualina Morales, madre de Juan Manuel Mura Morales, detenido desaparecido. En los años de dictadura, Pascualina envió una carta —convertida en poema— a Escucha Chile pidiendo ayuda para encontrar a su hijo. “Cuando leí ese texto en Londres 38, se me partió el alma. Supe que tenía que estar en el podcast”, recuerda Rodríguez. La voz que da vida a esa carta en el documental es la de María Victoria Corvalán, hija del histórico dirigente Luis Corvalán.

A lo largo de cuatro episodios, el programa reconstruye no solo la historia de un espacio radial, sino también la intimidad de quienes lo escuchaban. Familias enteras se reunían en la clandestinidad, bajaban cortinas, cubrían las radios con mantas y ajustaban improvisadas antenas —a veces con ollas o alambres— para captar la débil señal que cruzaba desde Moscú. En esos sonidos lejanos, distorsionados por la interferencia, encontraban información, compañía y esperanza.

“La radio era un refugio emocional. Y lo sigue siendo. Por eso este proyecto no es solo un rescate histórico, es también un homenaje al poder de la comunicación en contextos de represión”, enfatiza.

Entre la realidad y la ficción

Aunque se trata de un podcast documental, Rodríguez decidió integrar recursos propios de la ficción sonora para atrapar a las audiencias. El primer episodio abre con una dramatización basada en La Composición, un cuento de Antonio Skármeta publicado en la clandestina revista La Urraca en 1976. La escena, interpretada por los actores Adela Secall y Roberto Prieto, recrea el momento en que una familia escucha con miedo y esperanza las transmisiones de Escucha Chile.

“Era una manera de enganchar emocionalmente desde el inicio. Además, Adela es hija de Pepe Secall, quien fue uno de los protagonistas de Escucha Chile. Entonces ese guiño también tiene un valor simbólico muy potente”, destaca el académico.

Desde su estreno en septiembre de 2024 por Radio Universidad de Chile y Radio USACH, el podcast ha tenido una destacada recepción. Logró posicionarse entre los 100 más escuchados en el país y obtuvo el tercer lugar en el Festival Sonodoc de Argentina, especializado en documentales sonoros en español.

Pero más allá de los reconocimientos, Raúl Rodríguez subraya el sentido de este trabajo: “Escucha Chile demuestra que nunca está todo dicho sobre el pasado. Siempre se puede aportar algo nuevo. Este es un llamado a las nuevas generaciones a comprender que la memoria es un ejercicio vivo, y que contar historias desde la investigación rigurosa y la ética periodística sigue siendo fundamental para nuestras democracias”.

Mientras disfruta el impacto de este proyecto, Rodríguez ya tiene nuevos desafíos en marcha. Trabaja en un proyecto de ficción sonora que rescata dramaturgias olvidadas del siglo XX y en un nuevo documental sobre derechos humanos y memoria reciente. “La memoria es un territorio inagotable”, afirma. “Y sigue siendo urgente contarla”.

El podcast está disponible en Spotify y se puede escuchar aquí: