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Reconocimiento U. Chile
En una emotiva ceremonia en Casa Central, nuestra Ximena Poo recibió el diploma que la acredita como la Mejor Docente de Pregrado del ICEI, reconocimiento más que merecido por su incansable labor tanto en la jefatura de la Carrera de Periodismo, como en sus talleres de crónica y reporteo donde deja evidencias por doquier de uno de sus dones más preciados: pulir talentos como ninguna.
Quienes hayan conocido y compartido con Ximena Póo sabrán que es una mujer de hoy, con los problemas de hoy y las metas de hoy. Quiere hacerlo todo y bien y, se las ingenia para compatibilizar familia, amigos y estudios con su desenfrenada pasión por el trabajo docente.
Sí, Ximena definitivamente es una mujer de hoy, que van escribiendo a fuerza de sacrificios -y uno que otro colapso en el camino- páginas repletas de logros, con una convicción y entusiasmo envidiable. Mismo entusiasmo que busca inculcar a sus alumnos y que hasta ahora, sólo ha dado buenos resultados.
Es por estos méritos que la Vicerrectoria de Asuntos Académicos de la Universidad de Chile distinguió a nuestra Ximena Póo con el premio Mejor Docente de Pregrado 2008 de nuestra Casa de Estudios, luego de un proceso de selección efectuado en el ICEI, que tuvo en consideración la evaluación de los estudiantes, la opinión de los directivos y la decisión del Consejo de Instituto.
Con una humildad absoluta, Ximena sólo dice “gracias” entre sonrisas nerviosas. Sin embargo, este reconocimiento a su labor significa mucho en su corazón y en su mente. “La docencia forma parte de mi vida desde hace unos 18 años, cuando comencé haciendo mis primeras ayudantías en la academia y, luego, por decirlo así, cuando fui parte de equipos de trabajo periodísticos en diversos medios, sobre todo en el diario La Época y en España”.
Pero su diploma no es la única gran satisfacción de Póo. Para ella los gallos se ven en la cancha y en su caso, en la sala de clases. “Creo que lo más gratificante es ver cómo los estudiantes de Periodismo que están en mis talleres están creando y atreviéndose con nuevos medios digitales al mismo tiempo que aportan con el sello de la Universidad de Chile a medios ya establecidos y que requieren de autoevaluación permanente”.
Ximena está plenamente conciente del importante rol que juega un profesor en la vida de sus estudiantes y por eso no escatima esfuerzos en inculcarles mucho más que aspectos técnicos propios del quehacer periodístico. “En mis talleres y mis clases de aula intento articular la práctica con la reflexión crítica al quehacer periodístico. Los talleres son una sala de edición en tiempo y espacio ideal, en donde los estudiantes escriben y proyectan sus historias hacia lectores de América Latina y el sello está dado por las miradas: cada uno(a) va forjando un estilo, una forma de investigar, una mirada de país responsable y republicana”.
Para Póo, “la mirada crítica, humanista y con sentido respecto del 'mundo de la vida' para elevar el espíritu de nuestra democracia se pueden articular perfectamente con el desarrollo de competencias más bien técnicas”.
Con todo, Ximena ha sabido ganarse el cariño de sus alumnos, quienes no dudan en mostrarle afecto y agradecimiento, aún años después de titulados. Y es que Ximena deja huella, de esas indelebles en el tiempo, por su entrega y su constante preocupación por sacar lo mejor de sus estudiantes.
¡Felicitaciones Xime!
Quienes hayan conocido y compartido con Ximena Póo sabrán que es una mujer de hoy, con los problemas de hoy y las metas de hoy. Quiere hacerlo todo y bien y, se las ingenia para compatibilizar familia, amigos y estudios con su desenfrenada pasión por el trabajo docente.
Sí, Ximena definitivamente es una mujer de hoy, que van escribiendo a fuerza de sacrificios -y uno que otro colapso en el camino- páginas repletas de logros, con una convicción y entusiasmo envidiable. Mismo entusiasmo que busca inculcar a sus alumnos y que hasta ahora, sólo ha dado buenos resultados.
Es por estos méritos que la Vicerrectoria de Asuntos Académicos de la Universidad de Chile distinguió a nuestra Ximena Póo con el premio Mejor Docente de Pregrado 2008 de nuestra Casa de Estudios, luego de un proceso de selección efectuado en el ICEI, que tuvo en consideración la evaluación de los estudiantes, la opinión de los directivos y la decisión del Consejo de Instituto.
Con una humildad absoluta, Ximena sólo dice “gracias” entre sonrisas nerviosas. Sin embargo, este reconocimiento a su labor significa mucho en su corazón y en su mente. “La docencia forma parte de mi vida desde hace unos 18 años, cuando comencé haciendo mis primeras ayudantías en la academia y, luego, por decirlo así, cuando fui parte de equipos de trabajo periodísticos en diversos medios, sobre todo en el diario La Época y en España”.
Pero su diploma no es la única gran satisfacción de Póo. Para ella los gallos se ven en la cancha y en su caso, en la sala de clases. “Creo que lo más gratificante es ver cómo los estudiantes de Periodismo que están en mis talleres están creando y atreviéndose con nuevos medios digitales al mismo tiempo que aportan con el sello de la Universidad de Chile a medios ya establecidos y que requieren de autoevaluación permanente”.
Ximena está plenamente conciente del importante rol que juega un profesor en la vida de sus estudiantes y por eso no escatima esfuerzos en inculcarles mucho más que aspectos técnicos propios del quehacer periodístico. “En mis talleres y mis clases de aula intento articular la práctica con la reflexión crítica al quehacer periodístico. Los talleres son una sala de edición en tiempo y espacio ideal, en donde los estudiantes escriben y proyectan sus historias hacia lectores de América Latina y el sello está dado por las miradas: cada uno(a) va forjando un estilo, una forma de investigar, una mirada de país responsable y republicana”.
Para Póo, “la mirada crítica, humanista y con sentido respecto del 'mundo de la vida' para elevar el espíritu de nuestra democracia se pueden articular perfectamente con el desarrollo de competencias más bien técnicas”.
Con todo, Ximena ha sabido ganarse el cariño de sus alumnos, quienes no dudan en mostrarle afecto y agradecimiento, aún años después de titulados. Y es que Ximena deja huella, de esas indelebles en el tiempo, por su entrega y su constante preocupación por sacar lo mejor de sus estudiantes.
¡Felicitaciones Xime!
Fecha de publicación: Lunes 21 de noviembre, 2008 |
Texto: Ana Yáñez