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Universidad de Chile

Escuela de Cine y Televisión

Daniela Sabrovsky, nueva representante académica del CAIA: “La capacidad de crear no es privilegio de los profesionales”

Daniela Sabrovsky es nombrada nueva representante académica del CAIA

La académica de la Facultad de Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile fue designada como la representante del mundo académico en el Consejo del Arte y la Industria Audiovisual (CAIA), instancia liderada por el Ministerio de las Artes, las Culturas y el Patrimonio y que reúne a distintos actores de la sociedad relevantes para el mundo audiovisual.

Daniela Sabrovsky Baytelman es académica de nuestra facultad, licenciada en Cine de la Universidad de Valparaíso y magíster en Cine Documental de la Universidad de Chile. Además, integra el proyecto Cero en Conducta. Sus líneas de investigación son los métodos de enseñanza del cine, los modos de creación cinematográfica y la práctica de la creación como investigación. Con toda esta experiencia, la académica fue nombrada integrante del Consejo del Arte y la Industria Audiovisual en representación de los Académicos del Audiovisual, donde participa junto a representantes ministeriales de Relaciones Exteriores y Educación, así como también delegados del mundo actoral, producción, guión, dirección, entre otros.

La instancia es un organismo sectorial cuyo objetivo -según lo indica el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio- es “el desarrollo, fomento, difusión, protección y preservación de las obras audiovisuales nacionales y de la industria audiovisual, así como la investigación y el desarrollo de nuevos lenguajes audiovisuales”.

La cineasta fue propuesta en este cargo por la Red Universitaria de Cine y Audiovisual (RUCA) por su reconocido prestigio profesional en materias audiovisuales y ocupará el cargo por dos años desde su asunción oficial realizada el 5 de noviembre de 2024 en la primera reunión del Consejo.

En conversación con la Dirección de Extensión y Comunicaciones de FCEI, la académica Sabrovsky compartió sus objetivos de trabajo, la relevancia de ser representante desde nuestra universidad y la perspectiva que la diferencia en el espacio.

¿Cuál es la importancia de que académicas o académicos conformen el Consejo del Arte y la Industria Audiovisual?

Nosotros tenemos un papel relevante en la parte artística en la industria audiovisual, subrayando la palabra arte, porque la mayoría de los representantes tienen más que ver con la industria. Somos la parte interesada en la creación e investigación, además de, por supuesto, velar por el desarrollo del campo laboral. Pero yo diría que el énfasis para nosotros tiene que ver con el impulso de la investigación del cine y la entrega de fondos para la creación más allá del éxito en los circuitos más oficiales. Es decir, ampliar hacia otros espacios donde existe un mayor reconocimiento a la experimentación. También releva la relación entre cine y educación o entre cine y personas que no necesariamente son cineastas, velando por que la creación cinematográfica no sea patrimonio exclusivo de estos.

Y en ese trabajo, ¿qué sello hay en que la representante sea docente de la Universidad de Chile?

Yo creo que puedo aportar una perspectiva que está más ligada a la creación como fenómeno en constante evolución, como un fenómeno a estudiar. Puedo aportar desde ese mismo lado desde un énfasis hacia la experimentación, porque aunque es una inversión a largo plazo, es una gran inversión. Podemos hacer surgir obras que logren diferenciarse, ampliar el campo y su imaginario.

¿Hacia dónde irá orientado su trabajo en esta instancia?

A mí me interesa mucho impulsar los fondos de investigación, porque han estado un poquito olvidados. Los fondos de investigación en cine no tienen la misma preponderancia como en otras áreas artísticas. Es importante relevarlos y aumentar los modos posibles de publicación, porque existe en este momento solo una posibilidad de hacer publicaciones web con ciertos temas prioritarios que ya están establecidos. También me interesa impulsar el financiamiento de la participación de obras chilenas fuera de las competencias oficiales, abrirlo hacia, por ejemplo, selecciones no competitivas de festivales, que es donde se aceptan obras más experimentales. También buscaré impulsar fondos que alimenten el ecosistema universitario, incentivando el financiamiento a programas de posgrado en Chile. Pero, por sobre todo, me interesa mucho apoyar todas las acciones que tengan que ver con la relación cine-escuela y entre cine y personas no cineastas, para promover la idea de que todos somos cineastas y que la capacidad de crear no es privilegio de los profesionales. Eso tiene que ver con impulsar cineclubes, talleres y la inclusión del cine en el currículum escolar.

¿Cómo esta experiencia la nutrirá como docente?

Creo que lo hará a través del conocimiento que esto supone de las dinámicas de las políticas relacionadas al cine, además de conocer las demandas gremiales desde el mundo que está al otro lado de la academia, porque también es muy importante tener esa relación. Yo fui parte de ese gremio, trabajé en el cine, en la publicidad, mucho tiempo y conozco más o menos ese mundo, pero hace tiempo que no lo integro y creo que es muy importante estar actualizada, saber cómo funcionan las dinámicas de financiamiento, cómo funcionan los gremios, cómo funciona la industria en general. Es muy importante para un docente estar en contacto con lo que podríamos llamar “el mundo real".

¿Y qué significa para usted esta oportunidad en su calidad de cineasta?

Bueno, significa la oportunidad de poder tener voz y voto en las políticas públicas, que me parece muy relevante. Además, quizás sea interesante que esté ahí una cineasta que está un poco por fuera de los circuitos más oficiales y que puede aportar desde el punto de vista de una cineasta investigadora, de una cineasta académica que está interesada en el cine como un espacio de pensamiento, como un espacio de indagación, de creación y de ampliación de las posibilidades de mirar el mundo.