Ir al contenido
Universidad de Chile

María Olivia Monckeberg Pardo, en el Aula Magna de la FEN

Directora del ICEI participó en foro sobre el Lucro

Directora del ICEI participó en foro sobre el Lucro

La Premio Nacional de Periodismo 2009, María Olivia Monckeberg Pardo, participó en un foro organizado por la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh) llevado a efecto en el Aula Magna de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile, encuentro en el que también participaron Gabriel Boric, presidente de la FECh, y representantes de la Comisión Estudiantil de Proyectos de Ley (CEPLE) y del Centro de Estudios de la FECh (CEFECh). También asistieron el investigador del Centro de Estudios Públicos (CEP) Arturo Fontaine y los diputados Alejandra Sepúlveda y Rodrigo González, ambos integrantes de la comisión de la Cámara Baja que investigó el lucro en la educación superior.

La Directora María Olivia Monckeberg Pardo dedicó su exposición a explicar la evolución, propiedad y funcionamiento de las instituciones privadas surgidas después de 1981, al alero de las profundas transformaciones socio-económicas impuestas en Dictadura: todas las estratagemas tendientes a encrubrir las prácticas lucrativas -y que tienen a la Universidad del Mar como epítome de una violación a la ley bastante más extendida de lo que se cree-, las sombras que se ciernen sobre los procesos de acreditación, el "laissez faire" instalado producto de una fiscalización estatal a lo menos deficiente, la transferencia indirecta de cuantiosos recursos públicos a instituciones devenidas en fábricas de ilusiones, la opacidad de la industria, el sostenido aumento de costos propio en mercados de altísima demanda, el alto endeudamiento de las familias y la frustración que en muchos provoca la imposibilidad de ingresar al mercado laboral para desempeñarse en el ámbito de sus competencias.

Todo eso que María Olivia Monckeberg abordó en sus dos trabajos publicados "La Privatización de las Univer$idades. Una historia de dinero, poder e influencias" (2005) y "El negocio de las universidades en Chile" (2007). "Años atrás esto no era tema. No se hablaba de él en los canales de televisión y menos en los medios de prensa escrita pertenecientes al duopolio, lo que nos lleva a pensar que aquí hay una vinculación ideológica. Sólo era un tema cubierto por los canales de cable y por la radio", dijo María Olivia Monckeberg Pardo, al recordar el inicio de su trabajo investigativo.

"Pero ya por entonces podíamos saber de las sociedades de papel, las ‘sociedades espejos', de cómo fue la génesis de estas universidades, del ingreso en calidad de controladores de personas vinculadas a los grupos económicos y de los mecanismos para retirar las utilidades", añadió.

María Olivia Monckeberg también cuestiona los descargos de quienes se han visto aludidos en el informe de la Comisión Investigadora del Lucro en Educación Superior, al menos en lo que respecta a las objeciones formuladas en cuanto a la objetividad, legitimidad y calidad del proceso indagatorio. "Nada de esto debe sorprender pues hablamos en una verdadera industria en la que operan grupos económicos forjados en Dictadura y vinculados al poder político", subrayó la Directora del ICEI.

Asimismo, recordó que aún nadie se atreve a responder la pregunta del millón, esa que se responde por puro sentido común: ¿qué hacen los fondos de inversiones operando en un ámbito que, se supone, no genera altos índices de rentabilidad? ¿Es ahora la filantropía un atributo en entidades cuya único principio rector es la maximización de sus utilidades? Esa es la pregunta que precisa una reflexión urgente, a decir de la Directora del ICEI María Olivia Monckeberg Pardo, y que irremediablemente nos lleva a concluir que la educación es, en la práctica, un mercado en toda regla que mueve cientos de millones de dólares, que goza de importantes exenciones tributarias por ser no lucrativa, y donde han comenzado a aplicarse conceptos propios del comercio y la "industria" financiera ("cartera de estudiantes", por ejemplo, aplicado por la Universidad de Las Américas en 1996).

"¿Qué hacen, desde hace algunos años, los fondos de inversiones en la educación? No tiene sentido. En realidad, tiene sentido sólo si esto es un negocio", aseguró la Directora del ICEI, estableciendo cierta relación entre el ingreso de estas entidades y la creación del Crédito con Aval del Estado, decisión que dio un fuerte impulso a la expansión de estas universidades.

Asimismo, la Directora del ICEI se refirió a las últimas políticas públicas orientadas a "voucherizar" la relación entre alumno-cliente y universidades privadas, y que responde a un viejo clamor del sector privado. Esto es, que el Estado subsidie la demanda a través de créditos blandos -avalados por el propio Estado- sin que exista un marco regulatorio adecuado para tales efectos. "Hablan de ‘nivelar la cancha'... que el Estado ‘nivele la cancha', que en el fondo es una aspiración de crecer y extenderse a costa del Estado. Mucho han insistido en la idea de que todas las universidades son iguales, y que la tradición no es importante", subrayó.

"En mi investigación tuve acceso a testimonios personales muy desconsoladores. Recuerdo haber conversado con una persona adulta que quería ser técnico agrónomo. Le hicieron una ilusión, nunca le dieron el título pero de igual manera tuvo que pagar y, además, quedar con una deuda", agregó

Lucro: más que una cuestión de semántica

En tanto el presidente de la FECh, Gabriel Boric, criticó los cuestionamientos al trabajo de la Comisión Investigadora de la Cámara de Diputados, la inacción del ministro Harald Beyer frente a sus denuncias, la negativa del gobierno a reconocer y actuar frente a una masiva infracción a la ley y los intentos de parlamentarios de la Alianza por introducir elementos distractores en el desarrollo de este debate.

"La senadora Ena von Baer dice que no queremos lucro, aplicando la definición del diccionario. La otra vez, en un foro, un estudiante de una universidad privada dijo que nosotros no queríamos que un profesor no cobrara por su trabajo. Nosotros queremos que los profesores cobren por su trabajo, ojalá el mejor sueldo posible, y queremos que los profesionales y trabajadores de este país ganen un buen sueldo. Lo que no queremos es que los ingresos que recibe una universidad terminen en manos de unos pocos que no desean invertir en su proyecto educativo", declaró.

"Ese es el significado que damos al lucro, y no otro. Antes pensábamos que los personeros de la Alianza decían esto por desconocimiento o por ignorancia, pero a estas alturas pensamos que es derechamente de mala fe, ya que la definición de lucro ya la tenemos resuelta", concluyó.