Director de Cine y Televisión Carlos Flores

El rol del cine en la construcción de la memoria latinoamericana

El Director de la carrera de Cine y Televisión del ICEI, Carlos Flores, participó en el último congreso de Latin American Studies Association (LASA), entidad que congrega a académicos e investigadores especializados en la región. La construcción de la memoria fue el tema central del encuentro.

La construcción de la memoria colectiva, esa colosal sumatoria de recuerdos personales frente a una serie de acontecimientos grabados a fuego en la historia de un país, fue precisamente el eje central en la mesa redonda que tuvo a Carlos Flores, Director de la Carrera de Cine y Televisión del Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile (ICEI),  como expositor en el Congreso de Latin American Studies Association (LASA) 2012, llevado a efecto en San Francisco, California.

Al menos en lo que respecta a la construcción de la memoria, el cine de no ficción viene jugando un rol preponderante, en especial América Latina, donde hay viejas heridas aún por restañar. "LASA es una asociación de académicos dedicada a los estudios latinoamericanos. Se reúnen sociólogos, literatos, antropólogos y expertos de muchas otras disciplinas que ponen el foco de estudio en Latinoamérica. El programa es muy intenso y muy exigente. Lo importante es que este último tiempo están dándole mucha importancia al cine documental como modelo de representación de mundo", dijo.

Un proceso complejo que va mucho más allá de lo que puede hacer un Estado que, al menos en Chile, acometió la tarea de construir una narración que dejó de lado muchos "elementos que pueden resultar molestos", subrayó el profesor Carlos Flores. Sin embargo, esta omisión nunca ha sido óbice para que académicos e investigadores estadounidenses de LASA logren establecer un diagnóstico más o menos detallado de la realidad histórica latinoamericana, por cuanto el olvido, por muy involuntario o parcial que pueda parecer, indica inconscientemente una intencionalidad, y las omisiones reflejan la tendencia de un relato; en definitiva, el silencio dice mucho más de lo que nos pretende ocultar.

La memoria opera como una máquina que recrea vivencias de manera selectiva, cuyos filtros son siempre congruentes con los intereses o ideales de quien se atreve a ponerla en funcionamiento.

La construcción de memoria

"El tema era de la mesa redonda en la que participé se llamaba ‘Melodrama, Memoria y Tradición', y refería en específico al cine documental. Refería a cómo recordar, cómo hay procesos de construcción de memoria y recuerdos impulsados desde algunos estados muy autoritarios aunque sean formalmente democráticos. Fue un tema muy presente en la discusión, ya que es algo común a Latinoamérica", declaró el profesor Flores.

Su ponencia se basó en dos cintas distintas tanto en términos estéticos como en clave lingüística. "En mi caso les mostré dos películas: ‘Dear Nonna', de Tiziana Panizza, y ‘Estadio Nacional', de Carmen Luz Parot, dos realizaciones que trabajan en el proceso de recordar a través de modelos lingüísticos diversos. Tiziana Panizza utiliza la función del lenguaje que (Roman) Jackobson llama ‘la función poética'. Es un documental muy subjetivo en el que recuerda su infancia junto a su abuela, y esto en un contexto en que ella se encuentra en Londres y su abuela está perdiendo la memoria. Es un tipo de estructura narrativa que recurre a lo poético, basada en mecanismos de equivalencia y no de continuidad. Es una película llena de rasgaduras, hay mucho material de archivo, filmación en súper 8, sonidos que no calzan con la misma imagen. Atiende la subjetividad como algo desordenado", declaró.

"El trabajo de Carmen Luz Parot, en cambio, refiere en cambio a un hecho objetivo que afectó a un colectivo, pero discutible también porque hay distintas versiones sobre lo que ocurrió en el Estadio Nacional. Carmen Luz (Parot) trabaja la función referencial de lenguaje, entregando el dato más duro posible; no hay rasgaduras ni ‘chisporrotazos', sino que planos limpios, testimonios, documentos, cifras que dan cuenta de lo que ocurrió ahí. Son dos formas de recordar, y traen al presente representaciones distintas", agregó el profesor Flores.

El documental de Pinochet tiene mucho que ver con lo anterior, sostuvo Carlos Flores: "Me interesa mucho ver esa película porque también es un intento de representación de mundo. Puede ser una muy buena fuente de comprensión de cierta ideología y de ciertos fundamentos que desencadenaron crímenes atroces. Evidentemente este conjunto de personas no se hace cargos de esos crímenes, incluso siente que ni siquiera fueron crímenes".

El Director de la Carrera de Cine y Televisión cree, incluso, que sería una buena pieza de estudio. "Me gustaría mucho verla con los alumnos para analizarla", declaró, no sólo en cuanto a su contenido, sino que también respecto a su factura técnica.

"En toda película hay un susurro, un murmullo que dice algo más de lo que cuenta la misma película. Se da de manera inconsciente y de modo lateral a la línea de fábula que de seguro da vida a este documental", sostuvo el profesor Flores, quien declaró no sentir una particular predilección por películas de tinte biográfico: "Generalmente son como los monumentos que están en la calle y que idealizan los rasgos positivos de una persona; el héroe, el gesto magnífico y todo eso que ayuda a construir un mito".